Carlos Suarez y Liliana Sandoval

Liliana y yo somos un matrimonio sin hijos, moderno, viajero, que buscaba un sitio para echar raíces en medio de nuestros ires y venires para sentirnos en casa. En esa búsqueda encontramos un concepto: Medio Ambiente adaptable a modernidad, estética y confort; eso fue lo primero que nos atrapó de KUBIK. De la mano de Camilo Alvarado y su equipo, iniciamos el camino de un proyecto que poco a poco, se fue convirtiendo en la materialización de un sueño: sentir que el constructor se vuelve el dibujante de tus deseos, que se adentra en tus necesidades y se preocupa por plasmarlas en planos, era ya una sorpresa que difícilmente se encuentra en el mercado inmobiliario. Ver cuadro a cuadro, como por arte de magia y en los tiempos que te prometieron, que ese proyecto se convierte en una realidad, es parte de lo que para nosotros pasó de ser un sitio para echar raíces a transformarse en NUESTRO HOGAR. El hogar en el que vivimos felices y no olvidamos, se hizo realidad de la mano de quien empezó siendo el constructor y terminó siendo asesor, creador y amigo. Eso para nosotros es KUBIK.